Descripción
Pintura Religiosa de Isabel Flores de Oliva
Retrato pictórico de la mística peruana cristiana, representada con el característico hábito blanco y negro de la Tercera Orden de los Dominicos (Orden de Predicadores) el cual llevaba puesto a pesar de vivir en su propia casa. Fue proclamada Patrona del Perú en 1669 y del Nuevo Mundo y las Filipinas en 1670, pasando a ser canonizada por el papa Clemente X en 1671 siendo así la primera de los santos de las antiguas Indias Occidentales en recibir este reconocimiento por parte de la Iglesia Católica. Era tal su devoción que únicamente se permitía dormir un par de horas al día para dedicarle el resto del tiempo a la oración. Sobre su cabeza descansa la corona de rosas y espinas que utilizaba para simbolizar la propia Corona de Espinas que los soldados romanos le colocaron a Jesús durante su Pasión.
Detalles técnicos
- Pintura al óleo con barnizado final.
- Lienzo dispuesto sobre bastidor de madera.
- 55 x 46 centímetros | Formato vertical.
- Arte Sacro | Impresionismo | Expresionismo.